Pie de foto: Helena Buonanno Foulkes reacciona a la multitud reunida para el inicio de su campaña de gobernador en el Roger Williams Park Casino en Providence el martes 9 de septiembre de 2025. (Foto de Michael Salerno/Rhode Island Current)
El escenario está listo para una revancha con su rival demócrata de 2022, el gobernador Dan McKee
Por: Nancy Lavin
Desde una cuenta de campaña con siete cifras hasta apariciones públicas de alto perfil y una nómina en expansión, todo apuntaba al regreso de Helena Buonanno Foulkes a la política de Rhode Island.
Pero la exejecutiva de CVS y candidata demócrata a la gobernación en 2022 no pudo resistirse a un último adelanto.
“2026 será un año muy importante”, dijo a la multitud reunida de pie en el Casino del Parque Roger Williams el martes. “Estoy emocionada de compartir hoy, esperen… que voy a ser abuela”.
Segundos después, Foulkes confirmó el verdadero motivo del evento anunciado por su campaña como un “gran anuncio”: su candidatura a la gobernación en las elecciones de 2026. El anuncio consolida una revancha entre Foulkes y el gobernador Dan McKee, quienes se enfrentaron en unas primarias demócratas a cuatro bandas en 2022. Foulkes perdió frente a McKee por tres puntos porcentuales.
La residente de Providence, de 61 años, ya ha acumulado un fondo de campaña mayor para su regreso: $2.1 millones en efectivo al 30 de junio, frente a los $879,000 de McKee, según informes presentados ante la Junta Electoral de Rhode Island. Foulkes contrató recientemente al veterano consultor político Eric Hyers, quien dirigió campañas exitosas para el excongresista David Cicilline y la exgobernadora Gina Raimondo. Por su parte, el gerente de campaña de McKee renunció hace tres semanas, apenas meses después de haber sido contratado.
Horas antes de que Foulkes oficializara su candidatura, la campaña de McKee lanzó un anuncio digital en YouTube atacándola por su supuesto papel en la crisis de los opioides. El video de 60 segundos y el sitio web correspondiente, sheknew.com, citan la demanda del Departamento de Justicia de EE. UU. de fines de 2024, alegando que ejecutivos de CVS perpetuaron la epidemia de opioides mediante un estilo de liderazgo jerárquico que impedía a los empleados denunciar irregularidades. Foulkes dejó su cargo como presidenta de CVS Pharmacy Inc. en 2018, tras una carrera de 25 años en la empresa con sede en Woonsocket, que incluyó cuatro años al frente de su división farmacéutica. Su cargo ejecutivo coincidió parcialmente con el período mencionado en la demanda federal de 97 páginas, aunque Foulkes nunca fue mencionada por nombre.
En una entrevista tras su anuncio, Foulkes defendió su historial en CVS y destacó los esfuerzos de la empresa desde 2017 para reducir el uso indebido de opioides, limitar las recetas, ampliar el acceso a medicamentos para revertir sobredosis y prevenir fraudes y abusos de prescripción.
CVS calificó el anuncio de McKee como “lamentable y desalentador”.
“También es inapropiado desacreditar y tergiversar intencionalmente las contribuciones de nuestros 7,000 colegas que viven y trabajan en un estado al que hemos llamado hogar durante más de 50 años”, declaró la empresa.
El juego de las culpas
Foulkes devolvió el golpe señalando al gobernador McKee por la reciente pérdida de un importante empleador. El lunes, Hasbro Inc., el imperio de juguetes y juegos de Pawtucket, anunció que abandonará Rhode Island para trasladar su sede al puerto de Boston antes de finales de 2026.
Pero la salida de Hasbro no fue su única crítica. Foulkes también atacó a McKee por no evitar recortes al sistema de transporte público (RIPTA) y por los continuos retrasos y sobrecostos en la reconstrucción del Puente de Washington.
“Cinco años, gente”, dijo, refiriéndose al tiempo entre el cierre del carril oeste y la fecha estimada de finalización en noviembre de 2028. “Tuve cuatro hijos en cuatro años y medio”.
Cinco años, gente. Tuve cuatro hijos en cuatro años y medio.
La aspirante demócrata a la gobernación, Helena Buonanno Foulkes, sobre el lapso de tiempo entre el cierre del Puente de Washington en diciembre de 2023 y la fecha de finalización prevista para noviembre de 2028.
Con duras palabras hacia la administración estatal por su “incompetencia” y “burocracia”, Foulkes criticó el gasto excesivo, incluyendo el presupuesto de $14.3 mil millones para el año fiscal 2026.
“El año pasado, nuestros líderes hicieron lo que Rhode Island ha hecho durante años”, dijo. “Remendar un presupuesto, agregar nuevas tarifas y subir impuestos, usar un truco contable o dos, hacer felices a algunos lobistas e insiders. No rendir cuentas. No planificar.”
Más tarde, Foulkes reconoció que el gobernador no tiene autoridad total sobre el presupuesto estatal, el cual es moldeado principalmente por la Asamblea General y, en particular, por el presidente de la Cámara.
“Pero creo que el gobernador pudo haber ejercido mucho más control”, dijo sobre el papel de McKee en la elaboración del presupuesto de 2026. Respecto a su decisión de no firmar el presupuesto final, pero tampoco vetarlo, Foulkes concluyó: “Parece una forma muy débil de abordar la elaboración de un presupuesto.”
En contraste, se describió a sí misma como una candidata con “valentía”, dispuesta a tomar posición, ya sea para financiar plenamente el transporte público, apoyar la creación de un inspector general estatal o enfrentar a la administración del presidente Donald Trump, a quien calificó de “imprudente, irresponsable y beligerante”.
Tomando posición
Aunque McKee ha criticado recientemente al gobierno de Trump por la suspensión federal del proyecto eólico Revolution Wind, ha sido más reservado sobre los recortes presupuestarios, la suspensión de subvenciones y las políticas de inmigración y educación.
“Cuando miro a todos los gobernadores demócratas, no creo que el gobernador McKee haya estado en la primera línea”, afirmó Foulkes. “Mi mayor crítica es que no está planificando el futuro para los habitantes de Rhode Island.”
Foulkes cerró su discurso de 20 minutos declarando: “Nuestro actual gobernador no merece un tercer mandato”, mientras sonaba el himno pop de Lizzo, “It’s About Damn Time”.
El público incluía a numerosas figuras políticas y empresariales: los senadores estatales demócratas Sam Zurier (Providence), Lou DiPalma (Middletown) y Mark McKenney (Warwick); el representante Robert Phillips (Woonsocket); la presidenta del Partido Demócrata de Rhode Island, Liz Beretta-Perik; el alcalde de Johnston, Joseph Polisena Jr.; y la directora de la Coalición de Rhode Island Contra la Violencia Armada, Melissa Carden.
Foulkes comenzó su día desayunando en Central Falls junto a la alcaldesa María Rivera y el Dr. Pablo Rodríguez, comentarista de salud pública y política con su propio programa de radio. Su agenda incluyó reuniones con empresarios de East Providence y una actividad comunitaria en casa de un residente local. Según su campaña, planea realizar encuentros en las 39 ciudades y pueblos del estado este otoño.
Dos posibles contendientes para la gobernación en 2026, el presidente de la Cámara K. Joseph Shekarchi y la candidata republicana de 2022 Ashley Kalus, también emitieron declaraciones el martes.
Shekarchi, el mayor recaudador del estado con más de $3.8 millones en caja, dio la bienvenida a la candidatura de Foulkes.
“Admiro a cualquiera dispuesto a dedicarse al servicio público, que por experiencia sé que es desafiante pero gratificante”, dijo. “Los votantes decidirán el próximo año qué candidato tiene el mejor historial en defensa de las familias trabajadoras y las mejores ideas para liderar Rhode Island.”
Kalus, por su parte, criticó a Foulkes por un historial de “liderazgo corporativo fallido” y calificó el momento de su anuncio —tras la salida de Hasbro— como “oportunismo político”.
“Su campaña no es una apuesta por el liderazgo; es una venta de liquidación del estado de Rhode Island”, dijo Kalus. “Los votantes merecen algo mejor que otra persona bien conectada aprovechándose a nuestra costa.”