De la Desigualdad Económica a la Crisis Social
Este proceso de decadencia ha venido por décadas, se empeoro con la crisis del 2008 – 2009. De hecho, cuando en 2015 volvieron a alcanzarse las cifras anteriores a la recesión, los ingresos medios eran los del año 2000 y no los del año 2007. De manera semejante la recuperación, después de esa crisis fue muy desigual, así en 2016, el 10% que tenía más riqueza la había aumentado mientras que el 90% restante la había perdido.
La etapa de Gobierno de Biden ha aumentado esa desigualdad a pesar de, o precisamente por los estímulos para la economía dados desde la Casa Blanca. Ciertamente los salarios han aumentado, pero la inflación ha sido la más alta en décadas y ha devorado la subida salarial.
De manera bien significativa, un gobierno presidido por un católico y formado de manera aplastantemente mayoritaria por judíos y católicos ha provocado un mayor abandono del sistema industrial protestante en favor de un sistema favorable a las subvenciones y a impulsar la especulación económica por encima de la economía real.
Esa situación está amenazando seriamente el desarrollo del sistema democrático en la medida en que el poder de los lobbies se ha incrementado de forma extraordinaria y en que buena parte de la población ya busca soluciones que no son siempre ni lógicas ni racionales. También se ha visto afectada seriamente la tasa de pobreza en Estados Unidos, entre 1959 y 1969 la tasa de pobreza americana descendió más de 10 puntos, pero desde entonces en paralelo al gasto salvaje militar de la guerra de Vietnam se situó en el 12,5% donde se ha estabilizado desde entonces hace ya varias décadas.
También ha disminuido en Estados Unidos la posibilidad de ascenso social, los nacidos en los años 40 en Estados Unidos tenían más de un 90% de posibilidades de vivir mejor que sus padres, esa cifra se ha reducido al 50% para aquellos que nacieron en los años 80. Estas circunstancias en general, negativas se acentúan además por factores raciales así desde el año 1960 la riqueza media de las familias blancas se ha triplicado mientras que la de las familias negras prácticamente se ha mantenido constante.
Igualmente, por décadas la tasa de desempleo entre la población negra ha sido aproximadamente el doble que entre la blanca, de manera semejante en términos proporcionales el número de negros en grandes puestos es muy reducido, en 2020 por ejemplo de entre las 500 compañías más importantes de Estados Unidos sólo eran CEO´s cuatro negros cuando en términos proporcionales, al menos deberían haber sido 50. Hablando de la población hispana, en 2024 solo 14 hispanos ocupan estas posiciones.
Todo esto ha sucedido a pesar de todo un abanico de leyes que favorecen de manera específica a los negros y que se iniciaron con el New Deal en los años 30, se ampliaron colosalmente en los años 60 y desde entonces no han dejado de aumentar. El factor asistencial y el educativo pesan enormemente en esa situación ya que las familias con un licenciado en el año 2019 ganaban el doble que las que no contaban con alguien titulado y las familias con alguien que realice estudios de postgrado triplican los ingresos de aquellos que no los tienen.
De manera bien reveladora Estados Unidos se encuentra entre los primeros países del mundo en educación superior, aunque se haya por detrás de Japón y Canadá, a pesar de todo, los ingresos de los titulados crecieron de manera extraordinariamente rápida desde 1979 al año 2000 y a partir de entonces han caído.
Este articulo ha sido tomado de la editorial de Cesar Vidal del programa la voz del 5/21/2024, si necesitas tomar acción respecto a tus finanzas, estoy aquí para ayudarte. Puedes contactarme a través de mis redes sociales como @miguelbacata o utilizando la información de contacto al final de este artículo.