Antes de empezar a leer este artículo necesitaras un lápiz o algo para escribir, contesta honestamente las preguntas que leerás y una vez termines el artículo vas a necesitar tu calculadora para empezar a tomar decisiones:
1. ¿Evito gastar por si algo llega a pasar?
2. ¿Siempre busco la forma de pagar lo menos posible sin importar la calidad?
3. ¿Me ha pasado, que término pagando o gastando más por no analizar debidamente mis necesidades?
4. ¿Vivo en un entorno de pobreza o miseria?
5. ¿Me merezco una vida mejor de la que tengo?
6. ¿Cuándo fue la última vez que pase un momento agradable sin preocuparme por el costo?
7. ¿Conozco a alguien que sea definido(a) como, o yo he sido llamado(a) tacaño(a)?Si respondiste si a las preguntas de la número 1 a la número 4, son características de personas tacañas, si respondiste si a la número 5, eres consciente que necesitas mejorar, si no recuerdas la respuesta de la pregunta número 6, tienes un serio problema a nivel financiero, y si en la pregunta número 7 nadie a tu alrededor se define como tacaño(a), probablemente seas tú, ¿conoces o vives con alguien que cumpla estos parámetros?, ¿Qué resultados obtuviste?
La avaricia y la tacañería trabajan de la mano, es un círculo vicioso, se alimentan la una a la otra, de hecho pueden ser catalogadas como sinónimos. Son como una avalancha, va destruyendo todo a su paso, cada vez tiene más poder que va dejando a su paso ruina y miseria.
La avaricia, se define como el afán o deseo desordenado de obtener y acumular riquezas, entiéndase dinero, propiedades, o lo que tenga un valor monetario, con el único fin de atesorarlo para sí mismo(a) pero solo por tenerlo, por el placer personal, egoísta y ruin de tener y no porque sea necesario, para quienes son creyentes cristianos, deben recordar que la avaricia está catalogada como pecado.
La tacañería es una característica de personas poco dadivosas (no les gusta dar o regalar), son muy apegadas al dinero y los bienes materiales, siempre están buscando gastar lo menos posible. A nivel de neuro-ciencias es “el miedo a perder lo que se tiene”, cuando se vive en el miedo nuestro enfoque mental nos fija en lo que “no” queremos que pase, necesitamos recordar que nuestro cerebro no asume los “no”, él toma el resto de la frase, por eso termina pasando lo que tanto tememos.
Es común que una persona tacaña por ese miedo de no perder lo mucho o poco que tiene, termine gastando o pagando de más por algo que necesitaba, pues se mentalizó a que NO puedo o quiero pagar por esto o lo otro, lo primero es que su cerebro asumió solo el “puedo o quiero pagar por esto”.
Lo segundo es que normalmente terminan adquiriendo cosas de mala calidad, que no cubre sus necesidades, se dañan con facilidad, y el resultado es que tienen que comprar de nuevo, gastando de más y llegando a lo que tanto temen “NO – gastar dinero”.
Hay un constructo social en el que se dice “por tacaño(a) es que tiene dinero”, y puede ser cierto, podrán tener dinero… o no, pero lo que sí es real es que las personas tacañas viven miserablemente, porque ese es el entorno que han creado, eso es lo que atraen, no se sienten dignos de algo mejor, les falta autoestima, amor propio y un sentido real de merecimiento.
Si analizas a los millonarios a nivel mundial, tienen un patrón en común y es que ven el dinero como un medio, no como un fin, viven en abundancia y la clave es que manejan su riqueza con frugalidad, tema que ampliare en la segunda parte de este artículo.
Si necesitas ayuda para empezar a vivir lejos del ese miedo que te lleva a la tacañería y la avaricia, puedes contactarme, seguirme y escucharme en las plataformas de CreSer Evoluciona.
