Cerrar ciclos ya no es un cliché, sino una necesidad emocional y laboral. Las cifras globales muestran agotamiento, reorganización de prioridades y un deseo creciente de vivir con más intención. Este artículo explora por qué honrar lo aprendido —en vez de borrarlo— es clave para comenzar 2026 con claridad, propósito y una visión más consciente de futuro.
